“La
felicidad es solo la suspensión momentánea del desasosiego”
Raúl
Porras Barrenechea
La danza macabra, de Guy Marchant, París 1485 |
I.
La
mayoría de la población (¿?) está soportando el paro casi total
de las actividades económicas, porque gobernantes medianamente
razonables decidieron dotar al pueblo de bonos de supervivencia para
enfrentar la crisis, y eso que creemos consolarnos pensando en que
llegará ese auxilio económico, tarde o temprano, a todos los que lo
necesiten. En el otro extremo, la clase empresarial, los poderes
fácticos de los que tanto se habla, cuestionó, sin autoridad moral
para hacerlo, que se administren protocolos de seguridad sanitaria
para los trabajadores peruanos, porque según los peruanos de la
CONFIEP, no estamos en ningún país europeo y, por tanto, nuestros
trabajadores son de segunda o tal vez de tercera categoría, aunque
todo esté mejorando para ellos, porque los suspendidos laboralmente
por el gobierno, seguirán engrosando utilísimos ejércitos de
reserva, hasta el infinito.
Noticias
sobre la muerte de demasiados héroes anónimos nos atenazan y
estremecen porque sabemos que esos personajes, vestidos de policía,
de médico o de bombero, han dado la vida por todos los demás. Ellos
hicieron realidad el imperativo categórico kantiano, ese de "obrar
de tal modo que puedas querer que tus actos puedan ser ley para
todos",
esclareciéndonos que la solidaridad debe ser otro imperativo, por
cuanto es un mandato que no se puede dejar de obedecer, un mandato
que muy pocos obedecen, si queremos que el mundo sea un mejor lugar
para vivir. En esta época ha sido la solidaridad, por encima de
todos los demás factores, lo que nos ha mantenido vivos y algo
lúcidos.
El
sistema sanitario público en muchos lugares del mundo, en países
ricos, no tan ricos y el nuestro, ha colapsado porque fue
intervenido, desarmado y puesto en condiciones de casi inutilidad,
por gobiernos de un determinado signo ideológico durante casi 40
años, y que, en las condiciones en las que se encontraban
hospitales, clínicas y postas– sin ventiladores, ni mascarillas,
ni equipos de rayos x, ni personal médico ni paramédicos suficientes,
etc.- no pudieron siquiera paliar los efectos inmediatos de esta
nueva pandemia. ¿Por qué ocurren éstas cosas? O, yendo al otro
extremo, ¿por qué el 73% de la población de una comunidad de
peruanos originarios asentados en Lima, se ha infectado de
coronavirus?
¿Tendremos
oportunidad para reflexionar sobre lo que nos depara el porvenir?
cuando todavía estamos lerdos y atontados por el prolongado
aislamiento social, cumpliendo ineludibles medidas de confinamiento
que sí han violado nuestros derechos básicos, y para hacerlas
democráticas, aceptamos perder el derecho de movilizarnos para
conservar el derecho de estar vivos y saludables. Algo parecido a lo
que aceptaron los estadounidenses, espoleados por el miedo, cambiando
muchísimas libertades por el derecho a estar seguros, después del
terrible atentado a las Torres Gemelas.
La peste en Marsella, por Heinrich Erndel |
II.
John
Davis, de CounterPunch, en su último artículo sobre Ecología
Social, del cual hemos tomado parte del título, observa
que, una visión del futuro que nos espera, y nos traería alivio,
en la que “el potencial de las “transformaciones en cascada”
que podrían posibilitar una mayor igualdad, más oportunidades y un
mayor bienestar para la mayoría de personas en un mundo que renuncie
a los combustibles fósiles, modere los impactos del calentamiento
global y abandone su feroz destrucción de hábitats y su
concomitante exposición a nuevas enfermedades zoonóticas” no
será ni siquiera una posibilidad.
Las
pausas que ha tenido la producción industrial desenfrenada, la
deforestación y la emisión de gases de parques automotores de
megaciudades y conurbanos apocalípticos, entre otras, y que hicieron
posible la efímera aparición de delfines en las playas de La
Herradura o que las aguas de los canales de la romántica ciudad de
Venecia, generalmente pútridas y miasmáticas, se mostraran
cristalinas y llenas de vida. Y cuando parecía que podíamos
respirar aire más limpio y hasta aspirar a que esa parte sana del
Estado implemente muchas más ciclovías, porque las bicicletas iban
a reemplazar a los automóviles…en fin, eran solo ilusiones, eran
pausas de felicidad dentro de océanos de desasosiego, parafraseando
al gran Porras Barrenechea, porque lo que parece que se va a imponer
de manera definitiva es volver a la antigua normalidad, ya que la
normalidad que esperamos es solamente un espejismo en el desierto de
soñadores ecologistas que creen que los lobos pueden ser
vegetarianos.
Es
decir, ¿se volverá al viejo statu quo? ¿A aquello que existía
antes de? Eso es lo más posible, las minorías que controlan las
finanzas y las islas de crecimiento y modernidad, van a seguir
prosperando y exigiendo que los demás se sacrifiquen por ellos, como
los pobres griegos que fueron inmolados en el año 2015 en el altar
del europeísmo, porque
habían vivido por encima de sus posibilidades.
Atendiendo a un infectado por el letal virus del ébola africano |
III.
(y final)
John
Davis, vuelve a las andadas, y nos explica: “Jason Moore, en su
libro Capitalism
in the Web of Life (2015),
escribe que “las civilizaciones no se crean mediante
acontecimientos tipo Big Bang, sino que emergen a partir de una serie
de transformaciones y bifurcaciones en cascada de la actividad
humana…”. Sugiere también que el capitalismo “…emergió del
caos producido por la crisis histórica de la civilización feudal
originada por la “peste negra” (1347-1353)”. ¿Qué mundo
emergerá tras la pandemia del Covid-19?” Es la pregunta que se
hacen Davis, Zizek, Byung Chul Han, el suscrito y muchos otros.
¿Recuerdan
la Peste Negra? “La peste negra, peste bubónica o muerte negra
(Black Death), causada por la bacteria Yersinia pestis, ha sido una
de las pandemias más devastadoras en la historia de la humanidad.
Afectó a Europa en el siglo XIV y alcanzó su punto máximo entre
1347 y 1353, matando a más de un tercio de la población europea.”
(tomado de Wikipedia).
En
alguna prensa extranjera encontramos la siguiente coincidente
información al respecto: “En medio de tensiones sociales, crisis
y guerras, apareció
en 1347 la más letal epidemia que conocería el Medievo, la peste
negra,
que dejaría un rastro inaudito de muerte y miseria. “Con tanto
espanto había entrado esta tribulación en el pecho de los hombres
y de las mujeres, que un hermano abandonaba al otro y el tío al
sobrino y la hermana al hermano, y muchas veces la mujer a su
marido, y lo que mayor cosa es y casi increíble, los padres y las
madres evitaban visitar y atender a los hijos como si no fuesen
suyos”, describe Boccaccio en el Decamerón.
Para el anónimo autor de Viajes
de Juan de Mandeville,
un clásico de la literatura también escrito en aquel siglo,
“parecía como si hubiese habido una batalla entre dos reyes, y
el más poderoso y con mayor ejército hubiera sido derrotado y la
mayoría de sus gentes asesinadas”. En
torno a 48 millones de personas habrían muerto directa o
indirectamente,
ya fuera por contagio, por abandono –en el caso de ancianos y
niños– o por falta de recursos básicos.”
Esta
fue la causa más probable de desintegración del mundo feudal, que
propició la aparición de reyes que emergieron entre señores
desgastados por infinitas guerras y fueron afectados, finalmente, por
la pérdida de todo tipo de lazos con sus siervos, hasta que estos
los abandonaron y corrieron a las ciudades a solicitar la protección
de soberanos más fuertes. Eso más o menos ocurrió cuando la
sociedad eclosionó y el mundo quedó destruído por la plaga
apocalíptica.
¿Tendremos
oportunidad para reflexionar sobre lo que nos depara el porvenir? O
se acabará el mundo tal y como lo conocemos y emergerá un nuevo
orden más humano y más amable con la naturaleza o…..
Yhanara Julieth Espinoza Tarrillo 3ero B:
ResponderEliminarLo que más me llamó la atención fue la peste negra por toda la desgracia que ocurrió en ese entonces.
Delgado araindia elizabeth 3 "E" Lo que mas me llamo la atencion fue lo de la pandemia negra y todo el desastre que hizo por un buen tiempo
ResponderEliminarcamacho vilcherrez elizabeth 3ro"I" bueno lo que fue interesante es de esa peste negra ya que hay muerto tanta gente por esa enfermedad que es compatible al parecer con todo
ResponderEliminarMe pareció interesante y catastrófico la peste negra y la cantidad de muertos que hubo en ese tiempo
ResponderEliminarEs importante conocer todas estas epidemias/pandemias que diezmaron gran parte de la humanidad en su entonces. Ocurrieron bien por falta de higiene o falta de información. Además de los métodos para pararlas, que fueron muy inhumanas, como es el caso del ébola que afectó principalmente a África (en ese entonces te mataba en solo 6 días); los enfermos de esta fueron separados de las personas sanas y fueron a parar en una especie de domo donde esperarían hasta la muerte del último infectado (suerte tuvieron los que fueron llevados para investigarlos). Incluso esta que la provocamos nosotros por llevar prácticas completamente atroces como comer carne de animales que no se deberían comer, y la tala de árboles que hacen que los animales tengan que cambiar su habitad y estos traen consigo enfermedades que nunca habíamos enfrentado.
ResponderEliminarAlumno: Alfredo Valentino, Gonzales Ramirez.
Grado y sección: 3º "E"
Es interesante este tema Ya que estamos viviendo algo parecido en la actualidad . Y al igual que el covid sufren y mueren muchas personas . De Lesly coaquira chunga del 3 ero i
ResponderEliminarBueno un breve comentario , es que podemos apreciar como estás enfermedades como la peste negra y el Ébola han azotado al mundo hace años, y podemos ver una situación similar en la época actual, tambien podemos observar todo lo que hacian para poder frenar antiguamente LA PESTE NEGRA como por ejemplo alejarse de sus propias familias por el temor al contagio y variedad de cosas.
ResponderEliminarAlumna: Ivonne Roque Cahui
Grado y Sección: 3Ro "E"
Bueno yo he entendido de esta lectura y lo más impresionante fue de la peste negra ya que muchas personas estuvieron sufriendo por ese virus dónde desató muchas muertes pero eso tenían que combatirlo con la higiene personal ya que eso era la cura en ese momento, hasta que los científicos hagan una vacuna para combatirlo.
ResponderEliminarAlumno: Juan Pablo Crespo Poma
Grado y sección: 3Ro " J "
Se podría decir que la lectura se identifica con lo que estamos viviendo actualmente (Algo parecido), Diferentes formas de contagiar pero con el mismo final (se podría decir).
ResponderEliminarLa peste negra azoto al mundo hace años, es importante conocer todas estas epidemias o pandemias que atacaron a gran parte de la humanidad en su entonces.
Alumna: Marcas Chipana,Rubí
Grado y sección: 3C